São Paulo tiene el sistema escolar más grande de Brasil. Por ello, cuando en 2016, la Secretaría de Educación del estado decidió participar dos veces al mes en los Lunes sin carne (Meatless Monday en inglés), la iniciativa impactó en 1,7 millones de estudiantes (Meatless Monday es una campaña cuyo objetivo es lograr que todo el mundo deje de comer carne un día a la semana). Esto equivale a 3,4 millones de comidas vegetarianas al mes y supone 1.530 toneladas de carne menos al año.
Los colegios sirven una versión vegetariana del clásico brasileño, feijoada, con frijoles negros, arroz y col rizada entre otras verduras. Así los y las estudiantes comen un plato vegetariano que a la vez les resulta familiar.
Siguiente paso
São Paulo ha demostrado que quiere proporcionar a sus residentes comidas de origen vegetal. Para mejorar su compromiso, podrían intentar instaurar varios días vegetarianos a la semana en todos los colegios. Esto supondría más de 13 millones de comidas vegetarianas al mes.
El desafío global de Greenpeace:
Nuestros seguidores desafían a las ciudades a competir en lo más alto en reducción de carne para proteger nuestro clima, bosques y agua. Nuestro objetivo es que al menos 20 ciudades se comprometan a servir dos comidas vegetarianas (sin carne ni productos lácteos) en todos los comedores públicos semanalmente para fines de 2018. Esperamos tener al menos 100 ciudades globales que hagan esto o un mayor compromiso con menos y mejor carne y más comidas de origen vegetal para 2020.